De la mano de la Policía Nacional se ha llevado a cabo la detención de un grupo de cultivadores de marihuana que tenían dos plantaciones en la zona de Beniopa, en Gandía. Se trataba de plantaciones de interior que estaban en viviendas.
Los detenidos son una mujer y dos hombres que tienen edades comprendidas entre los 30 y los 40 años y que han sido acusados de dos delitos: defraudación por el consumo de fluido eléctrico que no les pertenecía y delito contra la salud pública. Sumando las plantas encontradas en ambas plantaciones, la policía ha incautado 136 plantas de marihuana que estaban en desarrollo.
¿Cómo se llegó al descubrimiento de lo que estaba ocurriendo? El motivo fue la alerta que dieron los vecinos, quienes estaban perplejos por el olor que se desprendía de las viviendas. Los vecinos llamaron a la policía en noviembre de 2022 y los agentes empezaron a investigar y a mover hilos para poder confirmar que se trataba de dos viviendas que se estaban utilizando como terreno de cultivo para la marihuana.
Junto a las plantas de marihuana también se han incautado otros elementos, como cinco aires acondicionados, 38 focos de luz y dos básculas para calcular los pesos. También se encontró material, como 137 gramos de hoja de marihuana y 380 gramos de cogollos.
Ninguno de los detenidos tenía antecedentes policiales, pero solo uno de ellos ha sido liberado. No es el primer caso que se produce en similares condiciones y las autoridades realmente esperan que este tipo de detenciones ayuden a que quienes se plantean delinquir de esta forma se lo piensen dos veces para evitar complicarse la vida.
Hoy por hoy se ha comprobado que cultivar en viviendas es prácticamente imposible y en especial si se cometen irregularidades como robar electricidad o tener una ventilación pobre.