En ocasiones, se llega a descubrir que el problema de la circulación de drogas se encuentra en algunos agentes de la ley que se ven tentados a caer dentro de esta práctica. Eso es lo que ha ocurrido en Alabama, donde un oficial de prisiones que estaba siendo investigado ha reconocido lo que estaba haciendo.
Para muchos prisioneros, entrar en la cárcel supone una oportunidad para conseguir desprenderse de su adicción a las drogas. No suele ser fácil, pero son muchos los que lo consiguen. Eso cambia si, por supuesto, dentro de la prisión existe algún tipo de oportunidad de llegar a conseguir drogas. Y eso es lo que estaba ocurriendo debido al papel que supuestamente hacía este oficial.
Después de ser detenido, el agente ha renunciado a su puesto y reconocido todo de lo que se le acusaba. Se le imputan varios delitos, como de haber promovido el tráfico de drogas dentro de la prisión. Según se menciona, lo que estaba haciendo era, principalmente, introducir metanfetamina en la cárcel y supuestamente otras drogas que no se han mencionado. Parece que lo hacía todo para un delincuente específico que estaba en la prisión y con el que tenía un acuerdo.
En el momento de la detención le sorprendieron con cantidades de unos 88 gramos de metanfetamina, así como otras drogas, pero se sospecha que podría haber llevado a cabo este tipo de movimientos con anterioridad. Las drogas que se relacionan con su actividad incluyen marihuana, xanax o incluso fentanilo, la droga que está provocando mayor cantidad de sobredosis en estos tiempos.
Las autoridades norteamericanas se toman muy en serio el problema que se pueda generar en algunos de sus profesionales, puesto que saben que tienen que mantenerse como un pilar que sirva como reflejo de la esperanza de los ciudadanos.
